Por La Costeña
Morelia MIch a 23 de febrero del 2017.- Hoy quiero compartir con ustedes el gozo de muchos empleados del Sistema DIF Morelia. La alegría es por la estabilidad que se ha logrado en esta institución luego de haber tenido en menos de un año dos directoras y una encargada del despacho.
Melissa Vázquez Pérez tomó la encargatura del despacho en el mes de mayo, tiempo en el que ha llevado una excelente relación con la señora presidenta, Paola Delgadillo de Martínez, quien no obstante de no ser funcionaria de la administración independiente si cuenta con la bendición de su señor marido y la comuna moreliano para disponer de los recursos de la dependencia y decidir quien la dirige, incluso goza del manejo de cuentas personales. Prebendas que da el ser esposa del edil capitalino, me confió el cuentachiles de mi compadre el Gumesindo.
Retomando. Melissa Vasquez Pérez lleva entonces casi un año en el puesto, periodo casi histórico, asumiendo que Elvira Santiago Monreal, Karla Isamara Hernández y Carmen Alicia Ojeda Dávila apenas duraron tres y cinco meses, pues todo indica que no dieron el ancho. Y digo esto porqué después de la sustitución de Karla Isamara, Paola Delgadillo aseguró que quien no cumpliera con las expectativas se iba a retirar.
Hay que decir que entre las “expectativas” no sólo esta meter en cintura a los miembros incómodos de los sindicatos, también incluía aguantar los desplantes de Paola Delgadillo y sus consejeros.
Y pasa que no es fácil seguirle el paso a la flamante presidenta del DIF Morelia, porque no solo tiene mal carácter, sino que tiene gente cercana también de mal genio, viscerales y hasta poco preparados para la función pública, este Gumesindo jura y perjura que hay un ex vendedor de hot-dog y una seudoperiodista que jamás escribió una nota en su vida, pero se hizo de su puesto de coordinación de prensa nomas haciendo boletines.
Pero no juzguen a mi compadre el Gumesindo, podría tener la razón. Me contó que una prueba de los malos amigos con los que anda Paola Delgadillo fue la aceptación de aquel premio Tonatzin, que otorga el Instituto Mejores Gobernantes y que tuvo que pagar para recibir.
Premio que ha sido rechazados por otras damas honorarias, como la de Matehuala en 2013 y que dijo no aceptarlo porque los 17 mil pesos que costaba mejor se aprovechara en bien de los oriundos de Matehuala.
¡Chispeajos, 17 mil pesos! Eso en el 2013 ¡En 2016 cuanto habría costado!
Pero a pesar del costo y dudas de la señora de Martínez Alcázar fueron por el premio y lo demás ya lo saben…
De lo que costo es fecha que no se sabe ni si se pago con recursos del ayuntamiento y ni como saberlo, porqué las malas lenguas de los reporteros dicen que si se atreven a preguntarle a la presidenta pide la cabeza del reportero, como si el bienestar familiar valiera tampoco ¡Pero cala que venga de quien perjuro velar por el bienestar de la familia! ¿ O me van a decir que no?
Original de: http://www.elbuhomichoacano.com.mx/los-cuentos-del-ayuntamiento-de-morelia-paola-delgadillo-la-jefa-de-jefas/
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