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Tequio Informativo
Los compromisos de Alfredo Ramírez Bedolla con funcionarios ineficientes
¿Qué oscuros compromisos obligan a Alfredo Ramírez Bedolla a incluir en su gabinete a personas que no han dado el ancho y han sido repudiadas por los sindicatos de las dependencias a las que inicialmente fueron asignadas?
El caso más notorio, sin duda, ha sido el de Teresa Mora Covarrubias en el Colegio de Bachilleres donde tuvo un desastroso desempeño y se confrontó con el sindicato dirigido por Ricardo Aguirre Paleo y ese enfrentamiento metió en serios apuros al gobernador Alfredo Ramírez Bedolla quien se atrevió a decir que familiares de líderes sindicales se llevan siete millones 700 mil pesos al año.
Eso dijo, pero hasta ahí quedó, en un señalamiento mediático porque en lo estrictamente legal nada hubo, no hay denuncias y si en realidad esas familias cobran esa cantidad…, pues lo siguen haciendo y es que Teresa Mora Covarrubias ya no está ahí.

Sí, Teresa Mora Covarrubias fue sacada del Cobaem, pero no se quedó sin empleo, Ramírez Bedolla la premió y la designó secretaria del Migrante y parece que seguirá causando dificultades porque los migrantes no tardaron en desaprobar su designación.
Otro caso es el de Paola Espinoza Barrientos quien comenzó su recaudación en la administración estatal como directora del DIF-Estatal y donde su pésimo comportamiento para con el personal sindicalizado la enfrentó con el STASPE que en repetidas ocasiones se manifestó en su contra.
Ahí la salida que encontró Alfredo Ramírez Bedolla para evitar la confrontación con el STASPE fue regalarle a Paula Edith Espinoza Barrientos una Notaría, la 203, en Tarímbaro, pero, quizá porque no le fue del todo bien, intentó regresar al DIF-Estatal, pero fue detenida en seco por el STASPE que, como muestra de su repudio, señaló “si la Notaría no es negocio, tampoco lo es el DIF”.
Y otra vez esos oscuros compromisos de Alfredo Ramírez Bedolla lo llevaron a colocarla como directora del ICATMI, tal vez ahí sí sea negocio. Sin embargo, habrá que esperar si Paola Espinoza Barrientos aprendió la lección que se le dio en el DIF-Estatal, porque de no ser así va a padecer en serio porque Osiris Heraz Gómez, lideresa sindical en el ICATMI, no es de las que se deja mangonear ni pisotear.
Y la pregunta sigue en el aire, ¿qué oscuros compromisos obligan a Ramírez Bedolla a mantener en su gabinete a personas que no han demostrado capacidad?