Catequizaron su revolución en las calles y la terminaron con sus enormes residencias, yates y aviones de primerísima clase.

Por: Salvador Hurtado

En el contexto mexicano, la frase “la clase de políticos frívolos que manejan el H. Congreso de la Unión” se refiere a una percepción, a menudo crítica, de algunos miembros del HCU (compuesto por la Cámara de Diputados y el Senado como personas que no toman sus responsabilidades legislativas con la seriedad y el compromiso necesarios. Esta percepción puede estar ligada a diversos factores, como:
Y es que algunos legisladores de todos conocidos pueden no tener la preparación técnica o el conocimiento profundo de los temas que se discuten en el Congreso, lo que lleva a propuestas o decisiones poco informadas y los que pudieran hacer algo recordemos que estos tramoyistas que se autonombran izquierdistas; Catequizaron su revolución en las calles y la terminaron con sus enormes residencias, yates y aviones de primerísima clase y gustan de vacacionar alrededor del mundo pues son millonarios con un repertorio de discursos políticos sobre la austeridad republicana, ¡háganme el cabrón favor!.
Se critica que algunos legisladores anteponen sus intereses personales, los de su partido, de quien les ordene en palacio nacional, o de grupos de poder a los intereses generales de la gente. Se señala a legisladores que incurren en actos de corrupción, tráfico de influencias, o que tienen un comportamiento desvergonzado y frívolo o poco respetuoso durante las sesiones legislativas, es decir con discursos falsos he hipócritas como si pensaran que los demás fueran estúpidos.
Los petardistas en el poder y que tienen algunos hasta décadas y no solo con Morena, pues algunos brincaron como changos cilindreros en varios partidos, además de que esos legisladores que saltan también de cámara a cámara, al gabinete, a embajadas y consulados estos últimos como premio a su traición y a quienes vendieron su alma a satanás, para evitar pagar penalmente por sus atracos pues solo hay que revisar y algunos que inclusive tienen orden de aprensión y otros mas carpetas de investigación penal.
Son legisladores que no representan a nadie con más cola que la pantera rosa que les pisen. ¡Finísimas Personas! convenientemente a modo con sus dizque electores, y que no se involucran activamente, ni les importa debatir en la solución de los problemas que afectan a la sociedad.
Es importante señalar que esta no es una percepción general porque no todos los miembros del Congreso de la Unión son vistos de la misma manera. Son muy pocos los legisladores que son reconocidos por sus trabajos serios, responsables y comprometidos con el país. Sin embargo, la percepción de frivolidad y falta de compromiso de la mayoría, es una realidad que influye en la opinión pública sobre el Congreso y la política en general, además de que el enfrentar al poder tiene sus secuelas de persecución y amenazas
En resumen, lo que se maneja sobre el H. Congreso de la Unión” describe una percepción negativa sobre muchos legisladores mexicanos, asociada con la falta de seriedad, capacidad, compromiso y ética en su labor.