Por Héctor Torres
Cada que se acerca el final de una administración estatal, empieza el burbujeo, las aguas políticas se agitan y de entre el río revuelto brotan aquellos y aquellas que corren a la fuente para limpiarse, desprenderse del color del gobierno que se va y se visten con los colores del que llega, ¿lo hacen por servirle al pueblo o por seguir medrando del erario público?
No hay convicción partidista; poderoso caballero es Don Dinero y no hay aroma más seductor que el olor del dinero para esos camaleónicos “servidores públicos” que transitan, sin rubor alguno, de una administración a otra, sea del color que sea, lo que realmente les importa es seguir figurando en un cuadernillo al que llaman nómina, y si, en esa transición, el salario aumenta, mucho mejor para ellos.
En el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla, en la nómina, hay ejemplos claros de quienes se despojaron del color amarillo y se vistieron de guinda, y ahí están, sin rubor alguno, imbuidos de servidores públicos.
Y en esa lista están Elías Ibarra Torres, secretario de Salud con Silvano y hoy con el mismo cargo con Ramírez Bedolla; Giulianna Bugarini Torres, directora del Instituto de la Juventud Michoacana con Silvano, y hoy en abierta disputa con Ana Lilia Guillén Quiroz por la dirigencia estatal del Morena. Ambas, no está por demás decirlo, vienen del PRD.
Gabriela Molina Aguilar, estuvo en las administraciones perredistas de Lázaro Cárdenas Batel y Silvano Aureoles; hoy, vestida de guinda, es la secretaria de Cultura. Caso similar es el de Óscar Celis Silva quien, colaboró en los gobiernos perredistas de Leonel Godoy Rangel y Silvano Aureoles, y, hoy, luego de un fugaz paso en Atención Ciudadana, ocupa el cargo de Director Regional de Bienestar.
Quien fuera directora de Desarrollo Metropolitano con Silvano Aureoles Conejo, ocupa en el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla la secretaría de Desarrollo Urbano y Movilidad.
Graciela Carmina Andrade García Peláez fue secretaria de Educación en el gobierno del perredista Leonel Godoy Rangel y ahora, con el morenista Ramírez Bedolla, asumió la rectoría de la Universidad Tecnológica de Morelia.
En Comunicación Social destaca la presencia de Claudia López quien estuvo como secretaria Particular de Julieta López Bautista y hoy, con Carlos Márquez, para desgracia de los comunicadores, ocupa el mismo cargo.
Y a la lista de ex perredistas que ocupan cargo en el gobierno morenista de Ramírez Bedolla hay que sumar a Carlos Torres Piña, secretario de Gobierno; Víctor Báez Ceja, director del Cecytem y Cristina Portillo Ayala, directora del Telebachillerato, aunque, claro, dentro de los mandos medios hay muchos, muchos más.
Pero, finalmente, tener la oportunidad de seguir medrando del erario público no es responsabilidad de ellos o ellas, es de quien los contrata, en este caso Alfredo Ramírez Bedolla, quien supone que esos personajes realmente están impregnados del slogan de su gobierno: honestidad y trabajo. ¿Será?
Ya en la siguiente entrega citaremos al monstruo administrativo creado por el doctor Frankenstein –Ramírez Bedolla-.
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