BAJO LA LUPA

Este jueves por la mañana, sucedió un hecho que solo sirvió para el escándalo mediático y político, empero, no percibí que alguien, algún grupo u organización política, haya utilizado dicho evento para invitar a la reflexión y a la necesidad política y estratégica de que, al término de un proceso interno de selección de candidatos a diversos puestos de elección popular, realizar una exhaustiva “Operación Cicatriz”.

En efecto, este jueves, el presidente del comité municipal del PRI en Morelia, SALVADOR GALVAN INFANTE, convocó a una reunión con organizaciones y liderazgos de su partido con los candidatos a diputado local, federal y al senado de la república, sin embargo, entre los convocados estaban la dirigente municipal de las mujeres MIRNA JANET GARZA BARRIGA y la hoy candidata por el distrito XVII del PRI, KATHIA ELENA ORTIZ ÁVILA, mujeres que por la vía jurisdiccional están dirimiendo la candidatura que hoy está en manos de ORTIZ ÁVILA.

Continuar presente y participar en la reunión, implicaba según GARZA BARRIGA, validar y legitimar lo que aún está en disputa y más aún, legitimar la participación de quien no se distingue por ser una militante del tricolor con lo merecimientos, como el CEN de ese partido lo ha hecho, para entregarle una candidatura inmerecida.

Así las cosas, MIRNA JANET GARZA BARRIGA y algunas de sus acompañantes decidieron retirarse del evento convocado por GALVAN INFANTE, refirmando que se iban por “congruencia” y en defensa de las mujeres priistas que han sido mayoritariamente marginadas por la dirigencia nacional del PRI.

Lo anterior se señala, en virtud de que en algunos medios de comunicación se esparció la especie, de que la reunión la había convocado DANIELA DE LOS SANTOS y que el retiro de las mujeres del evento, obedeció a un desdeño a la ahora candidata a presidenta municipal, de manera que es claro que DE LOS SANTOS TORRES no tuvo nada que ver con tal evento.

No es una condición particular lo sucedido dentro de la vida política del Partido Revolucionario Institucional, por desgracia, es condición de la mayoría de los partidos políticos cuando terminan la celebración de proceso internos de selección de candidatos a puestos de elección popular y esta circunstancia se agrava y termina por afectar los resultados electorales, en virtud de que los adversarios políticos circunstanciales, se convierten en enemigos, con el denuesto a las instituciones políticas.

Los que salen ganadores de las posiciones o candidaturas, son adjetivados de manera peyorativa, lo que proyecta una imagen negativa de ellos mismos y de su instituto político, teniendo como consecuencia, que el elector les niegue su voto, por considerar que, sí para un proceso interno no son capaces de ponerse de acuerdo, menos lo serán en caso de que le tocara gobernar un pueblo, pero que además llegaron a las posiciones de manera inadecuada.

Por su parte, los no agraciados con las posiciones, se victimizan en virtud de que fueron objeto de procedimientos de selección violatorios de las normas de sus respectivos partidos o bien de procedimiento irregulares, adoptando actitudes, no solo en contra de sus dirigencias sino de sus propios partidos, con las consecuencias señaladas.

Desde el punto de vista de este escribidor, debería existir una regla escrita o no, de que al termino de un proceso interno de selección de candidatos o dirigentes de los partidos, debe de iniciar sus trabajos un equipo integrado por militantes destacados, que realicen lo que se conoce como “operación cicatriz”, a efecto de que las diferencias generadas por el proceso entre militantes, sean allanadas.

La conciliación de intereses, que en algunos partidos llaman “unidad”, es una condición sine qua non, se puede aspirar al triunfo electoral, de manera que conciliar esos intereses al interior de los partidos, debe de ser la primera actividad que realicen los cuadros dirigentes o militantes con solvencia política y moral.

Por otro lado, respecto al anterior señalamiento, hay que puntualizar que dicha “operación cicatriz” la deben de operar e instrumentar los dirigentes partidarios, siempre y cuando estos hayan sido los responsables de la toma de decisiones para la selección de candidatos, por que en el actual proceso, hay dirigentes que fueron rebasados en sus potestades, por instancias superiores de sus respectivos institutos políticos y en esa tesitura, es imposible que sean ellos quienes instrumentes la llamada “operación cicatriz”.

Vaya que fue “calientita” la sesión extraordinaria del cabildo moreliano que inició el pasado miércoles y terminó la madrugada del jueves, con una “sesión extraordinaria” en al que los regidores le aprobaron una ampliación presupuestaria de más de 100 millones de pesos, sesión en la que se “reprogramaron” obras del Programa Anual de Inversión 2017 y se incluyeron en el POA 2018.

Lo curioso fue, que en las obras reprogramadas por la administración municipal que encabeza PONCHO MARTÍNEZ, se incluyeron obras que ya se pagaron y que no existen, obras que no se van a realizar, pero su costo si fue cargado al presupuesto municipal como el caso de la obra de la “Ciclovía del Acueducto”, la cual ya fue cancelada, según los datos proporcionados por el secretario de Efectividad e Innovación Gubernamental, Antonio Plaza Urbina.

En dicha sesión, JORGE TINOCO explicó que le volvió a preguntar al secretario de Efectividad “El Pato Lucas” PLAZA, sobre la obra de Acueducto, y la respuesta fue que está cancelada porque el Gobierno del Estado será quien se encargue de ejecutarla, sin embargo, “La construcción de la Ciclovía en Acueducto y calles aledañas es por un monto de 3 millones 569 mil pesos; que se canceló por que la ejecutará el gobierno estatal, es incongruente que esté en la lista de reprogramación una obra que no se va a llevar acabo” manifestó TINOCO.

Al respecto, MARTÍNEZ ALCÁZAR dijo a los regidores que la obra se volvió a reprogramar a pesar de que está cancelada, por que es la única forma de “recuperar” esos recursos, lo que pareció más un “cantinfleo” del edil, pues no se puede recuperar lo que no se gastó, pues la obra no se hizo ni se hará.

La tan presumida policía municipal que pregona el presidente municipal “independiente” PONCHO MARTÍNEZ, que ya son al derredor de 800 integrantes, es motivo de que otros órganos de gobierno, municipales, estatales y hasta de otros países, vengan a conocer su modelo de organización, empero, el ahora candidato a la reelección, no les dice que Morelia está ubicada entre las 3 ciudades más peligrosas del estado de Michoacán.

Lo más grave, es que el ahora candidato PONCHO MARTÍNEZ, no dice a los visitantes, que la policía municipal de Morelia, no tiene el equipo mínimo de equipo para operar en la seguridad de Morelia, excepto en el caso de los uniformes, donde podemos apreciar que la policía moreliana es de las mejores vestidas del país, pero no tiene armas, no tiene patrullas, existen al derredor 200 bicicletas para los policías, pero no las usan.

Resulta que, con una aportación del Subsidio para el Fortalecimiento de la Seguridad en Entidades Federativas y Municipios, el famoso FORTASEG, el municipio obtuvo recursos para la adquisición de patrullas y PONCHO MARTÍNEZ decidió que se debían de adquirir 60 vehículos de la marca Volkswagen Tipo Jetta, para patrullas de la ciudad de Morelia.

¿Son los vehículos apropiados para patrullas? No. Es claro que, por las características del municipio de Morelia, que en su extensión territorial tiene una gran área rural, a más de que lo deteriorado de las calles de la zona urbana, hace que esos vehículos no sean los adecuados para ese trabajo, sin embargo, el edil MARTÍNEZ argumentó que por disposiciones de las “reglas de operación” del FORTASEG, en el sentido de que deben ser vehículos de 150 caballos de fuerza y 2.0. Litros y que solo los Jetta, cumplen con esa especificación.

Según la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automóviles, en el mercado nacional hay por lo menos 16 modelos y marcas de vehículos, con un valor igual o inferior a los 250 mil pesos que cumplen con esa especificación, pero, además, al revisar la citadas “reglas de operación” del FORTASEG, no existen datos que confirmen el dicho del edil capitalino.

Claro que fue relevante la actitud del regidor OSVALDO RUÍZ, al que se le quitó lo aguerrido en las sesiones de cabildo municipal desde que le dijeron en su partido, que no iba a ser el candidato a presidente municipal, pues se vio muy condescendiente con el edil y emitió su voto a favor de la ampliación presupuestal. ¡Vaya que le pegó al regidor no ser candidato!

Cosas que veréis en la política poco creíbles, pero que son. Resulta que el ahora candidato del Partido revolucionario Institucional a diputado federal por el distrito 10 con cabecera en Morelia Oriente, GERÓNIMO COLOR GASCA, está envuelto en una vorágine muy complicada y un grave “conflicto de interés”, pues siendo él candidato del PRI, su esposa, la señora DIRVANA AGUIRRE OCHOA, es dirigente municipal en Morelia del Partido Verde Ecologista de México y será candidata de ese partido a diputada local.

¿No acaso es un gran conflicto de interés, el que en un distrito apoye a su partido el PRI y en otro, por que su esposa es la candidata PVEM, lo combata? De ninguna manera pretendo que el matrimonio se deshaga ni nada por el estilo, pero si es necesario que lo que ahí sucede quede fuera de perversiones y malas acciones.

Este jueves por la tarde noche, algunos medios de comunicación y personajes de las redes sociales, esparcieron el rumor de que la policía había decretado un supuesto “Código Rojo” porque en la ciudad de Morelia, estábamos bajo la amenaza del narco y exhortaban a la población a “tomar precauciones”.

Es cierto que, en algunas poblaciones del estado de la región de tierra caliente, hubo movilizaciones de grupos delincuenciales y quema de vehículos, pero de ahí a esparcir un rumor en Morelia, me parece que es igual de criminal si realmente lo hicieran, pues hay gente que, por preocupación, modifica su estado emocional y agrava enfermedades y padecimientos.

Me extraña, sobre todo, porque pienso que quienes ejercen la comunicación y el periodismo, aún no siendo profesionales, si nos regimos por normas éticas y morales, de manera que difundir rumores falsos, es además de cruel, inmoral.